Aplicar la inclusión también al compartir un recurso, es la frutilla del postre de todo su proceso de elaboración. Tan importante es la inclusión en la etapa final que, si no se logra, se desmerece todo el proceso anterior.

Por ello, considera estos tips:
- Convierte el archivo a formato estándar (imprescindible)
- Agrega una descripción alternativa al recurso:
- si es un objeto visual, provee de texto alternativo o un archivo sonoro
- si es un archivo de audio, añade una descripción textual y/o un video en lengua de señas
- Si un archivo muy grande, evita comprimirlo.
- Si no tienes más remedio, prioriza el formato .zip por sobre el .rar (ninguno de los dos es estándar, pero al menos el primero es el más utilizado)
- Si decides alojar el recurso en algún servicio en la nube, prefiere aquellos que no requieran hacerse de una cuenta de usuario para poder descargarlo
- Si decides en cambio compartirlo por las redes sociales, hazlo por aquellas más populares entre los destinatarios.
- Optimiza el recurso para pantallas pequeñas. Por ejemplo, si es un archivo de texto, incorpora una versión en formato .ePUB. Los archivos PDF resultan poco amigables para leer en smartphones
Si te interesa este tema, házmelo saber y en próximas entradas lo ampliaré ¡Hasta entonces!!!
Espero la segunda parte.
Saludos,
Henry Torres
Me apetece saber más sobre el tema. Es interesante y me gustaría profundizar más sobre el tema en cuestión. Gracias.